CUANDO
LA TIERRA SE MUEVE
Roberto
S. Contreras Esparza
La
tierra se mueve, tiembla y esto ha sucedido siempre. Para nosotros los
habitantes de la Ciudad de México, este tipo de movimientos nos dan pánico y
causan un verdadero caos cada que suceden, y lo único que podemos hacer ante
ellos, es estar listos y tomar las prevenciones correspondientes, ya que los
movimientos continuarán, sin saber cada cuando se darán, y solo nos queda
prepararnos para ellos. Y como esto no es nuevo, se han imaginado: ¿Cómo eran,
veían y entendían nuestros antepasados este tipo de movimientos?, ¿que pensaban
cuando la tierra se movía?
TEMBLORES
EN LA GRAN TENOCHTITLÁN
Cada
que se acerca el día del 19 de septiembre y se conmemora el temblor del año
1985 y ahora el del 2017. Se presentan programas, documentales y notas
referentes a los movimientos de la tierra, y se explica, se habla sobre lo que
estos temblores han representado y como repercutieron en el pasado, aunque no
hay mucha información sobre los tiempos prehispánicos, algo se ha averiguado al
respecto. Como sabemos y nos enseñan desde la escuela, la Gran Tenochtitlán,
imperio de los mexicas, se componía de islotes empedrados y chinampas
elaboradas de tierra, cañas, zacate y demás material que tenían en ese momento.
Así formaban grandes redes con este tipo de sembradíos en donde cultivaban sus
verduras básicas de aquellos días. Y así, de esta forma, del centro del lago de
Texcoco, surgió una gran ciudad que maravillo a los mismos europeos.
ESTRAGOS
POR LOS TEMBLORES
E
igual como siempre ha sucedido, en esos tiempos también sufrían los estragos de
los movimientos de tierra. Por ejemplo y para darnos una idea de cómo se vivía
esto en el México antiguo, encontramos referencia en los Anales de Tlatelolco,
la relación histórica más antigua en lengua náhuatl, en donde aparece la primera
descripción de un movimiento de tierra en México y ahí dice que, en 1455, se
dejó testimonio de ello de esta forma: “… hubo también terremoto y la tierra se
agrietó y las chinampas se derrumbaron; y la gente se alquilaba a otra a causa
del hambre”.
TLALOLLIN
SIGNIFICADO Y DESCRIPCIÓN
En
el México prehispánico, según cuentan los que saben que, el glifo temblor de
tierra se forma con el glifo ollin que significa movimiento y el glifo tlalli,
que significa tierra. El primero de ellos se representa con un círculo
alrededor del cual aparecen cuatro aspas de colores que dan idea de movimiento.
De esta manera, talli asociado a ollin, forman tlalollin, que significa
“movimiento de la tierra o terremoto”. Resumiendo, “tlalollin”, es el símbolo o
glifo que usaban los mexicas para referirse a los temblores, era un pictograma
de una esfera, que, si era toda roja, quería decir, que el temblor había sido en el
día, pero cuando el pictograma era la esfera con un ojo semi abierto, indicaba
que el movimiento de tierra había sido por la noche.
EL
SOL SE TROPIEZA
También
hubo sismos fuertes en esa época, pero las casas eran de material ligero y las
pirámides no se caían con los temblores, por la forma que tenían. La pirámide
imita la forma de un volcán, con una base muy ancha. La fuerza de un sismo no
basta para volcar un cerro ni una pirámide. Por lo que se sabe, la gente no les
tenía tanto miedo a los temblores como ahora. Los sacerdotes decían que eran
causados por el ollin, que es el movimiento de los astros. Temblor en náhuatl
(como se dijo renglones arriba) se dice tlalollin, es decir, movimiento de la
tierra. Por ejemplo, cuando Venus se ponía en el horizonte y luego reaparecía
en el oriente a la mañana siguiente, explicaban que tuvo que caminar bajo
tierra en plena oscuridad, y a veces se tropezaba: eso era un temblor. Los
temblores eran muy fuertes cuando el Sol se tropezaba. Y cuando ocurría de día,
bueno, hay astros incluyendo a la Luna, que se ponen en la mañana y reaparecen
en el oriente al atardecer. Para esos tiempos, era una teoría tan buena como
cualquiera otra y tenía su lógica.
EN
LA ÉPOCA COLONIAL
Mas
tarde, y con la influencia invasora ibérica en la colonia, los fenómenos
naturales, como los sismos, eran entendidos como un castigo ejemplar del Divino
que enviaba a los humanos pecadores, esto, al no comprender de que se trataba,
se creí que era por un castigo, lo cual provocaba mucho miedo, y la gente se
refugiaba y hacían lo que dijera la iglesia. Según Fray Bernardino de Sahagún,
cronista novohispano, los sismos formaban parte de la conciencia colectiva de
los mexicas y, por lo tanto, tenían una especie de código moral para actuar
según sus creencias cuando se presentaba uno.
SI
NO LO HACÍAN EL TEMBLOR SE LOS LLEVARÍA
En
este escrito, más o menos uno se da una idea de cómo se comprendían estos
movimientos de tierra por aquellos días y que se tenía que hacer al respecto:
“Cuando tiembla la tierra, rociaban con agua todas sus alhajas, tomando el agua
con la boca y soplándola sobre ellas, y también por los postes y los umbrales
de las puertas y de la casa; decían que si no hacían esto, el temblor se
llevaría aquellas casas consigo; y los que no hacían esto eran reprendidos por
los otros; y luego que comenzaba a temblar la tierra comenzaban los gritos;
dándose con las manos en las bocas, para que todos advirtiesen que temblaba la
tierra. Luego tomaban a sus niños con ambas manos, por las sienes, y los
levantaban en alto; decían que si no hacían aquello que no crecerían y que los
llevaría el temblor consigo”.
HAY
QUE ESTAR PREPARADOS E INFORMADOS
Interesante
es conocer algo de lo que por aquellos años ocurría y como se comportaba la
gente ante estos siniestros. Actualmente, aún no sabemos cuándo temblara y de
que magnitud será, por lo mismo, creemos que la mejor forma de enfrentar este
tipo de fenómenos, es estando informados con lo que digan las instituciones
correspondientes, que son serias, objetivas, y no hacer caso a notas
amarillistas sin fundamentos, ni difundir lo que ahí se diga, porque esto solo espanta y aterra
a la población. Mejor, estemos listos e informados.