UN VIAJE MÁGICO A TLALMANALCO

“LUGAR DE LA TIERRA PLANA”
Roberto S. Contreras Esparza

Recientemente visitamos la zona aledaña a los Volcanes, el propósito era de cubrir varios reportes sobre los no identificados que se dan ahí con mucha frecuencia y para ello, hemos estado realizando varios viajes a lugares como Amecameca, Tlalmanalco, Chalco, Cocotitlán y demás poblados circunvecinos de la región. Pudimos conseguir algo de material, una interesante imagen de un objeto que al parecer es metálico y que sale en una nítida fotografía, una toma fortuita. El que tomo la gráfica no vio en ese momento al “objeto”, pero como casi siempre sucede, a la hora de revisar las fotos se percató de lo que ahí se ve. En una sola toma de todas las que realizo, que según averiguamos fueron como 45 fotografías hechas de esa zona. Aquí les mostramos la interesante foto. Véala a detalle, analícela y ojala nos dé su punto de vista sobre ella. Porque bien podría ser parte de la evidencia de esos objetos con movimientos inteligentes y de origen desconocido que constantemente son vistos, grabados y fotografiados en los volcanes. Además es material que en un futuro próximo, esperamos utilizar para hacer un artículo detallado sobre esas imágenes en donde salen objetos fortuitos y otras formas más captadas por esos lugares.

UN LUGAR CON INTERESANTE HISTORIA

Por ahora y aprovechando una de nuestras salidas, quisiera hablarles de un lugar al cual ya tenía el gusto de conocer, y ahora nuevamente pudimos regresar y caminar por sus calles y averiguar más de lo que ahí hay. Me refiero a Tlalmanalco, un lugar apacible y muy agradable con ciertos detalles que resaltan y sobre todo hay que comentar, por lo cual, aquí dejaremos nuestra opinión sobre estos detalles del poblado que por ahí pudimos apreciar.

Tlalmanalco, cuyo significado en náhuatl es “Lugar de tierra aplanada o nivelada” es un municipio localizado al oriente del Estado de México. Se ha averiguado que durante su época prehispánica fue uno de los cuatro Estados Mayores de Chalco llamado Tlacochcalco. Limita al norte con los municipios de Chalco e Ixtapaluca, al sur con el municipio de Amecameca y Ayapango, al poniente con Cocotitlán, Temamatla y Tenango del Aire y al oriente con el municipio de Huejotzingo del estado de Puebla. Este municipio se encuentra en las proximidades del Volcán Iztaccíhuatl, lo que provoca que abunde la vegetación con agradables y frías áreas verdes. Ahí también se localizan el cerro denominado el Faro y el río Apipitza con sus aguas originadas del deshielo del Iztaccíhuatl.

Tlalmanalco posee sitios arqueológicos de gran interés histórico y turístico entre los que destacan su iglesias (que por cierto, a la entrada le instalaron una enorme lona que hace ver mal esta parte, no sé si sea temporal, pero le quita atención a la antigua entrada ocasionando que se vea fea y poco estética). El conventos es de la época colonial, ahí se ve marcadamente la huella de la evangelización franciscana. Según pudimos averiguar, que la Capilla Abierta de Tlalmanalco es un edificio de carácter europeo, de estilo plateresco en su conjunto, realizado por manos tlalmanalcas. Se afirma que su construcción comenzó en 1536 y concluyó en 1560. Es considerada la más importante de las 74 existentes en México y le ha dado fama mundial a Tlalmanalco, que al parecer ahora poco les importa por el descuido y poca atención a ciertas áreas del lugar. En la actualidad está al resguardo del INAH (Instituto Nacional de Antropología e Historia).

PERSONAJES Y SERES MISTERIOSOS

LLENOS DE SIMBOLISMO

Capilla abierta de Tlalmanalco es un interesante ejemplo de lo que algunos han dado en llamar arte tequitqui, “vasallo o mejor tributario”, aunque actualmente se define como arte indo cristiano. Algunos investigadores creen que la ornamentación de la Capilla Abierta representa algo como una danza de la muerte, esto está basado en que los personajes que van tomados de la mano en las decoraciones de la capilla son parecidos a los personajes en las danzas macabras gráficas. Hay figuras que son difíciles de concebir en la simbología de nuestros antepasados, las formas grotescas y peculiares, bien podrían ser el resultado del pensamiento mágico hispano y el natural. Su interior es de estilo protorrenacentista y está decorado con motivos de origen y estilo italiano con figuras que parecieran haber sido tomadas de un bestiario indígena.

Hay que poner especial atención al arte iconográfico del claustro, cargado de elementos simbólicos y muy extraños para nosotros, como angelitos o niños tipo atlantes, el fantástico macho cabrío que se dice representa la lujuria, liebres con enormes garras, aves extrañas y un “Elefante” (que lamentablemente se está perdiendo). Además se aprecia lo que podría ser un retrato de fray Martín de Valencia, quien se cree podría ser el posible autor del conjunto arquitectónico y de santa Clara, fundadora de la sección femenina de la orden franciscana.  

¿HAY ZONA ARQUEOLÓGICA EN TLALMANALCO?

Buscando en Tlalmanalco que conocer o que sitios podrían ser de interés para el visitante, averiguamos que también ahí hay lo que queda de una zona arqueológica. Esto no es de extrañarse, porque por fortuna nuestro país es bendecido con este tipo de evidencias que dejaron nuestros antepasados, pero lo que nos sorprende es el marcado abandono casi total y las condiciones en que esta este sitio. Yo no sé en qué piensa la gente encargada de ver y proteger este tipo de lugares, no sé si la atención debe de ser del INAH o de los principales políticos de ahí, los cuales, muchas veces están más ocupados en ver que se pueden llevar, que ponerle atención a zonas con estas características, que se sabe, atraerían de gran forma el interés del turista y a los amantes de nuestra historia, que le daría un status especial a Tlalmanalco por poseer lugares con estas características, lo cual sería de gran beneficio para todo el poblado.

VESTIGIOS DE UN GRAN PASADO

Buscando información sobre lo que queda de cimiento arqueológicos en Tlalmanalco, pudimos averiguar, que el señor José Alberto Domínguez escribió hace unos años, algo relacionado sobre la venta de este terreno y la poca atención de las autoridades correspondientes que al parecer no les importaba y la tenían en el olvido. En este comunicado el señor José Alberto, da parte de su intento por rescatar el interés por las raíces, identidad y la cultura de Tlalmanalco y pedía el salvamento de los vestigios arqueológicos que (en aquellos años) se vendía el terreno por la cantidad de 2 millones de pesos.

El lugar o terreno en donde se encuentran los vestigios ceremoniales arqueológicos, es conocido como la Pirámide, se localiza entre las calles del Naranjo, Guerrero y la Rosa y se pedía a la comunidad vecina y encargados políticos, que esa área fuera rescatada, ya que los dueños de origen libanes, pretendían vender el terrenos con los cimientos de lo que parece ser un gran Teocali en dos millones de pesos. Por lo cual la junta vecinal tratando de resguardar su pasado y cultura historiada, le hacían un llamado a los antiguos políticos del Estado de México e incluso se pedía la intervención del que en ese momento era el presidente Enrique Peña Nieto. He aquí parte de la petición de los habitantes de Tlalmanalco a los políticos del sexenio pasado:

LLAMADO DE AUXILIO A LOS POLÍTICOS
DEL SEXENIO PASADO

“Pedimos al gobernador, Eruviel Ávila Villegas y al propio presidente municipal, Rubén Reyes Cardoso, así como al diputado federal, Juan Manuel Carbajal Hernández, que rescaten este edificio de la época prehispánica, ya que, se perdería la historia de nuestros antepasados”, dijo. Señaló que, dada la importancia de los vestigios precolombinos, y que no ha sido explorada por arqueólogos y antropólogos del Instituto Nacional de Antropología e Historia, (INAH), por debajo de la Pirámide, se pueden encontrar cientos de joyas mesoamericanas, “De por sí, este monumento histórico ha sido zaqueado en muchas ocasiones”, destacó. En este sitio, se podría construir un museo, casa de cultura, áreas deportivas y juegos infantiles, ya que la población de infantes, el parque recreativo el más cerca les queda a 7 kilómetros de este lugar, por lo que le pedimos al mismo presidente de la república, Enrique Peña Nieto, que sea rescatado las raíces, identidad y los vestigios arqueológicos antes que sea destruido por las manos del hombre”.

AL RESCATE DE NUESTRO PASADO PRECOLOMBINO

Este fue el llamado “urgente” a los políticos del sexenio anterior. No sabemos qué sucedió, pero por lo que vimos en la actualidad parece ser que la ayuda no fue mucha. Nosotros pudimos ver los restos de lo que era una pirámide, que está ya invadida y unas láminas parten su construcción. Nos dijeron que el otro lado era un terreno particular. Una situación muy lamentable, no se sabe si el INAH ya esté a cargo de esa zona, nosotros no vimos ningún letrero o algo que así no lo indicara. Aún queda una buena parte de terreno a investigar y se destaca una serie de protuberancias, montículos en línea frente a la única construcción que queda, no sabemos si son recientes o son parte de ese llamado centro ceremonial prehispánico, de esa pirámide que aún queda ahí. Los mismos vecinos cuidan e informan al visitante, pero lamentablemente no han podido parar el saqueo y que se tire basura a sus alrededores. 

CUIDEMOS NUESTRA CULTURA

Muy lamentable y da lástima ver sitios así. Estos lugares nos hablan de nuestra grandeza, cultural, sobre lo que fuimos y lo que hoy es Tlalmanalco. Sitios así deben de ser rescatados, restaurarlos. Se puede hacer un museo de sitio y estamos seguros, que como ha pasado en otros lugares, los mismos vecinos aportarían lo que han hallado en esos terrenos. El poblado se haría más interesante al turista, se incrementarían las entradas económicas y pondría a Tlalmanalco entre esos lugares especial de nuestro México, en esos poblados que cuenta con sus vestigios o zonas arqueológicas. Esperamos que el INAH, o los políticos correspondiente puedan hacer algo al respecto y que rescaten la riqueza precolombina que sitios de este tipo aún conservan. Ojala esto sea posible y a futuro podamos visitar estos lugares mágicos como Tlalmanalco.