TESTIMONIOS
Magaly
Santiago de Colima, México
Cuando
uno es pequeña, nuestras abuelitas o mamas, nos enseñan que tenemos un Ángel de
la guarda que siempre nos protege de todo mal, en mi caso fui creciendo y por
un motivo u otro me fui olvidando de él (mi Ángel). Yo tengo una hermana mayor
a la que le gusta leer mucho, artículos y libros de todo tipo y recuerdo que en
una ocasión me platico de un libro muy interesante que hablaba ampliamente de
los Ángeles y gracias a eso me hizo recordar aquellos momentos bellos que me
platicaba mi abuelita y mama cuando era niña.
PEDIR
POR LO QUE UNO MÁS QUIERE
Recuerdo
que en aquella ocasión y casualmente después de la plática con mi hermana, yo
estaba mirando la televisión, un programa de muy interesante, un día 12 de
diciembre, y recuerdo muy bien la fecha porque ese era el día de la Virgen de
Guadalupe. En el programa salió un señor que se decía especialista y comentaba
que ese mismo día bajaban los Ángeles y que si queríamos hacer un ritual a tu Ángel,
ese era el momento, para lo cual, debíamos de poner una vela blanca, flores
blancas, incienso y dejar la ventana abierta para que nuestro Ángel pudiera
entrar a la casa, pero sobre todo, teníamos que pedir, pedir lo que uno más quisiera.
Y
LLEGO MI ÁNGEL
Pues
yo, fui a comprar todo lo necesario y me prepare para el ritual, comencé a elaborar
una larga lista de peticiones y entre esas le pedía a mi Ángel perdón por
haberme olvidado de él, pero que lo invitaba de nuevo a mi casa, a mi corazón. Y
así continuo todo normal, hasta el día 20 de diciembre que una amiga a la que
quiero mucho , se fue de intercambio por medio de una escuela de Chile, pero
antes de irse se despidió diciéndome ---Mira, te dejo un regalito para que
nunca te olvides de mi--- De regreso cuando llegue a mi casa abrí el regalo y
para mí fue una sorpresa inimaginable, parecía algo increíble, ya que mi amiga,
me había dejado, me había regalado un “Ángel”, mi Ángel de la guarda, algo que
de cierta manera yo había pedido días antes el 12 de diciembre durante aquella
ceremonia. Muchos incrédulos me dicen que es coincidencia… Pero para mí fue un
milagro, y desde entonces todo lo que he pedido a mi Ángel, poco a poco se me
ha cumplido, y lo más importante, es que no me siento sola, se que a donde voy
mi Ángel me acompaña.
No hay comentarios:
Publicar un comentario